Alimentos para depurar el hígado


Ayuda a tu hígado a depurarse en primavera

El Hígado es un órgano con muchísimas funciones vitales en nuestro cuerpo. Interviene en la función digestiva, segrega la bilis que ayuda a transportar los desechos y a descomponer las grasas en el intestino delgado durante la digestión. Almacena nutrientes y elimina sustancias tóxicas. Sintetiza enzimas, proteínas y glucosa. Regula la mayoría de los niveles de sustancias químicas de la sangre. Toda la sangre que sale del estómago y los intestinos pasa por el hígado, y éste la procesa, la descompone y equilibra. 


El Hígado es un gran depurador del organismo. Pero también se suele sobrecargar, y su importante labor de almacenar la sangre, mantenerla limpia y distribuirla a todo el cuerpo se ve afectada por diversos factores. Las comidas copiosas, el exceso de grasas, alcohol, comidas procesadas, azúcar, el estrés, las alteraciones emocionales como la ira y las emociones reprimidas sobrecargan el hígado y lo dañan. Aparecen la duda, la frustración, el enojo, y variados trastornos físicos como la fatiga, el insomnio, el estreñimiento, malas digestiones, alergias, cefaleas, reumatismos, trastornos ginecológicos, circulatorios, etc. Cuidarlo con una dieta adecuada, respiración, ejercicios y emociones positivas te equilibran,  te ayudan a depurar  y a sentirte con más energía.

Alimentos y Hierbas que protegen tu hígado 


Alcachofas: Contienen hierro, fósforo, potasio, vitaminas A, B1, B2 y C. Contribuyen a la limpieza y desintoxicación del hígado. Favorecen la secreción de bilis y el drenaje biliar. Gran diurético. Por su contenido en cinarina, reducen los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, y también de azúcar. Usadas en casos de diabetes y para tratar la obesidad.  
Las flores (Alcauciles) cocidas al vapor y mezcladas con jugo de limón y unas gotas de aceite para realzar su sabor, 2 o 3 veces por semana. 
Las hojas en infusión (30gr/L), tres tazas por día. 




Brócoli: Rico en azufre, desintoxica el hígado. Con propiedades diuréticas. Se destaca en la prevención de la anemia por su alto contenido de hierro. Proporciona además, fitonutrientes y varias vitaminas y minerales, incluyendo las vitaminas C y E, y calcio. Cocido al vapor o al wok, es un alimento excelente y nutritivo, 2 o 3 veces por semana. Se puede consumir en variadas modalidades, como en sopas, guisos de verduras, en tortillas, tartas y salsas, salteado con ajo y aceite de oliva. Además, frío se consume en variadas ensaladas. 




Pepinos: Ricos en potasio, sodio y fósforo neutralizan la  acidosis de la sangre, tienen propiedades diuréticas que facilitan la excreción de deshechos a través de los riñones. Con gran aporte de agua y minerales. Consumirlos a diario en zumos o batidos y ensaladas. 




Acelgas: Ricas en vitaminas, sales minerales y fibra. Ricas en calcio y magnesio. En cuanto a vitaminas, destaca la presencia de folatos, vitamina C y betacaroteno o provitamina A. Son refrescantes, digestivas, diuréticas, nutritivas, laxantes. Muy buenas en inflamaciones de la vesícula e intestinos, en cólicos hepáticos, en la gota, reumatismo, diabetes, en inflamaciones del riñón. Cocidas al vapor, en ensalada o bien el zumo crudo. Las raíces en cocimiento a razón de 100gr por litro, beber por tacitas de las de café, 3 vece por día, en trastornos del hígado.




Espinacas: Muy nutritivas por su alto contenido de hierro. Contienen, además, complejos de vitamina B y vitamina C. Desintoxican el canal digestivo; restauran el PH; calman la inflamación intestinal; favorecen la peristalsis. Consumirlas crudas, ya sea en ensaladas o como zumo, mezclando 6 partes por cada 10 partes de zumo de zanahoria: 1 litro al día. 





Remolachas: Muy buenas alcalinizadoras. Neutralizan los ácidos acumulados en el organismo. Poseen muchas sales minerales. Alivian lo trastornos del bazo, de los nervios y del hígado. Son laxantes, depurativas, refrescantes y emolientes. Deben ser cocidas ligeramente. Las hojas tiernas mezcladas con acelga y lechuga, forman una excelente ensalada. El zumo de remolacha (3 partes), pepino (3 partes) y zanahoria (10 partes) es muy rico en elementos orgánicos alcalinos como sodio, potasio y fósforo: neutralizan la acidez, ayudan a expulsar los gases, favorecen la peristalsis: 1 litro al día.  





Zanahorias: Son muy buenas desinfectantes y depurativas. Eliminan las flatulencias y los gases. Son laxantes suaves y desintoxicantes. El zumo de zanahorias crudas limpia de desechos todo el canal digestivo, desintoxica el hígado y equilibra el sistema endocrino, todo lo cual ayuda a curar y prevenir la obesidad: 1 litro al día.




Manzanas: Ricas en antioxidantes y en pectinas; previenen la oxidación celular y favorecen el tránsito intestinal y la eliminación de sustancias a través de las heces. Neutralizan la acidez. De efecto diurético por sus propiedades depurativas. Consumir una manzana al día, cruda (con el estómago vacío).





Judías Verdes - Habas- (Chauchas): Ricas en potasio, ayudan a curar la colitis, la inflamación del páncreas y el endurecimiento del hígado. Consumirlas enteras, ligeramente salteadas. Hervidas, o en zumo extraído en crudo, 1/2 litro al día, puede mezclarse con zumo de zanahoria para mejorar el sabor. 




Diente de León -Amargón-: Depurativo, diurético, tónico digestivo. Rico en potasio, calcio, sodio, hierro y magnesio. Alcalinizante del torrente sanguíneo. Su sabor amargo estimula las funciones hepáticas y biliares. Favorece la eliminación de toxinas y ayuda a la formación de la bilis. Drena y refresca la vesícula biliar. Consumir las hojas tiernas en ensaladas o en infusión 3 tazas al día.  De la planta se utilizan la raíz, hojas y flores. 




Cardo Mariano: Colagogo, aperitivo, diurético y ligeramente laxante. Drena la bilis. Posee una sustancia llamada "silimarina" proveniente de las semillas de la planta, que restaura la célula hepática (hepatocito), útil en las cirrosis, intoxicaciones crónicas, insuficiencia hepática, etc. La silimarina protege al hígado al actuar como un antioxidante y promover el crecimiento de nuevas células hepáticas. Consumir las hojas tiernas sin espinas y los corazones del fruto crudo en ensaladas o en infusión 3 tazas al día. 





Boldo (Peumus Boldus): Con propiedades digestivas y hepatoprotectoras. Diurético, antioxidante, carminativo, analgésico y antiinflamatorio. Estimula la producción de bilis. Drena y refrigera la vesícula biliar. Fluidifica y depura la bilis, previniendo la formación de cálculos biliares o piedras en la vesícula. Tomar infusiones de las hojas de Boldo 3 tazas al día. Tomar 15-30 minutos antes de las comidas como aperitivo y para estimular la salivación. Después de las comidas como infusión digestiva.









Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares